Inicia tantas veces como sea necesario
- Patricia Cruz
- 7 jul
- 6 Min. de lectura
Cada día trae su propio afán y nos vemos rodeados de muchos planes, sueños, metas, proyectos pendiente, agenda, bueno de todo un poco. Pero, ¿qué ocurre cuando las cosas no salen como queremos?
¡Bienvenida a este nuevo blog!
Estaremos conversando de un tema que me emociona demasiado porque definitivamente es algo que me pasa muchas veces y quiero saber si a tí también te pasa igual.
Inicia tantas veces como sea necesario.
¿Qué quiere decir esto?
Cada día trae su propio afán y nos vemos rodeados de muchos planes, sueños, metas, proyectos pendiente, agenda, bueno de todo un poco. Pero, ¿qué ocurre cuando las cosas no salen como queremos?
Yo creo que a todos nos ha pasado que contamos con una agenda perfecta y esta agenda no salió, contamos con un proyecto, un sueño, una gran meta comenzamos a trabajar y a mitad de camino nos quedamos sin fuerzas, sin energía, pasan muchísimos inconvenientes que hacen que nos detengamos. ¿Qué ocurre después? ¿Se queda cancelada esta meta? ¿Se queda cancelado ese plan? ¿Se queda cancelado este sueño? ¿O tenemos la valentía de iniciar nuevamente? Hoy yo te quiero invitar a que inicies tantas veces como sea necesario.
No tienes idea las veces que he comenzado proyectos y pasan inconvenientes en el camino y tengo que detenerme, pero hoy te invito a que tú inicies tantas veces como sea necesario. Porque esa es mi meta cada día que ocurre algún inconveniente. Un ejemplo de esto es precisamente esto que estamos haciendo, este blog, no tienen idea las veces que yo he iniciado este proyecto y pasan veinte mil cosas en el camino. No solamente en cuestión a la agenda, sino a inconvenientes, he puesto veinte mil excusas desde no cuento con el equipo necesario hasta no tengo el tiempo. Sin embargo, cuando miro mis 24 horas del día digo, Patricia, tú puedes ser mejor administradora del tiempo y tu puedes cumplir este proyecto del blog. ¿Por qué? Porque es algo que me apasiona demasiado, me encanta compartir hábitos que he conocido y desarrollado a lo largo de los años, y sé que pueden ser de ayuda para ustedes, pero siempre ocurre algo que me detiene. Una de mis grandes metas es aprender a iniciar tantas veces como sea necesario y aquí estamos nuevamente en este proyecto. Aunque, me he detenido muchas veces también, quiero tener el valor de iniciar tantas veces como sea necesario. Y aunque las cosas no salgan de la primera o en un inicio no sea como esperaba, por ejemplo, yo esperaba que el blog estuviera disponible todos los domingos a las 6:00 p.m. pero no pasó así, sin embargo, hoy un lunes estoy grabándolo y siento toda la fuerza y toda la confianza de publicarlo el día de hoy. Esto me recuerda algo muy importante:
“Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.” Eclesiastés 3
Muchas veces nosotros olvidamos que no tenemos el control de todo lo que pasa y aveces las cosas no suceden en nuestro tiempo, pero sí yo tengo una gran confianza que en el tiempo exacto cuando ocurren es cuando tenían que pasar. No sé si te pasa que tenías un gran proyecto, por ejemplo, quieres administrar tus redes sociales de una manera específica y no lo logras. Sin embargo, ocurre un momento específico que hay un “clic”, algo en el ambiente que te impulsa a trabajarlas en ese momento y resulta que ahí es donde viene el éxito y empiezan a surgir grandes cosas que has soñado o imaginado. Por esto, a pesar de que muchas veces me detengo, proyectos no salen o planifico cosas y salen otras yo me refugio en que todo tiene su tiempo. Luego inicio nuevamente, y ese momento que inicié nuevamente es el momento perfecto porque hay alguien afuera esperando justamente en ese tiempo ese proyecto que estoy lanzando.
Tal vez, tienes una gran empresa o estás comenzando tu negocio y quieres dar más pero simplemente esto no ocurre. Con esto intentas estar más activa en redes sociales, hacer más proyectos, dar más de ti y empiezas con toda la energía, toda la fuerza a hacer todo lo necesario. Más de momento te detienes pasando varias semanas en calma y completa pausa, sintiendo estancamiento al no caminar al propósito que tienes. Pero, de momento inicias nuevamente y ves que tienes un gran respaldo, muchas veces nos frustramos por ese momento que hubo de pausa, pero era necesario y justo cuando inicias nuevamente es la confirmación de este texto:
“Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.” Eclesiastés 3
Porque aunque anhelamos hacerlo en un momento tuvo más beneficio y provecho en otro. Esto me recuerda otra escritura: “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.” Romanos 8:28
Me encanta este texto, ¿por qué? Porque muchas veces queremos forzar las cosas a nuestro tiempo, momento o forma. Por otro lado, si nosotros vivimos confiados de que ese proyecto que tienes en tus manos es parte de tu propósito o llamado, créeme no importa cuanto tiempo tarde, se cumplirá.
Con esto, tengo un pequeño testimonio, lo que ocurre hoy con Pat, ya que desde hace años, siempre decía “me encantaría ayudar a personas que no estudiaron sistemas de oficina ni administración, más hoy día tienen un negocio y necesitan aprender a manejar asuntos administrativos”. Sabemos que si te especializas en otra profesión como la belleza, construcción, música, en fin muchísimas profesiones que hay para escoger, al comenzar tu negocio vienen muchas dudas, preguntas yprocesos administrativos que necesitamos agregar a nuestro negocio para que comience a tomar estructura para que comience a brindar los frutos que esperamos. Por esto, decía me gustaría ayudar a personas que se han especializado en otros campos necesitando procesos administrativos a integrarlos a su negocio, sin embargo, no sabía como esto iba a pasar o cómo comenzar. Actualmente, llevo 9 años interactuando con personas que tienen sus negocios y mi mayor pregunta era como esto se puede convertir en un trabajo para mí más otras dudas en su momento. Hoy, varios años después, aproximadamente 8 años después es que comienzo a ver realidad de esa imaginación o meta que siempre me preguntaba cómo se iba a cumplir. Resulta, el tiempo perfecto de Dios no era hace 8 o 9 años atrás, sino ahora, ¿por qué? Porque durante todo ese tiempo tuve que experimentar con mi propio negocio, cometer errores, comenzar desde cero, iniciar tantas veces como fue necesario con muchas paradas en el camino, pero mucho aprendizaje. Así que, todo ese tiempo hizo falta para llegar a lo que es hoy Pat. La razón por la que siento que cosas que ocurren hoy no fueron hace 8 o 9 años atrás, creo porque no estaba preparada. Si estas oportunidades de hoy día hubieran surgido hace años atrás no hubiera sabido manejarlas y habría sido un desperdicio por no saber manejarlo. Esto, te puede estar ocurriendo si te sientes frustrada por pausarte, no te preocupes vas a iniciar tantas veces como sea necesario. Si algo no te está pasando hoy pero es parte de tu propósito, créeme estas en el proceso para llegar a la meta. Tal vez, si no te llega hoy no es que no sea para tí, simplemente estás preparándote. Confía en que todo tiene su tiempo incluso el más pequeño detalle de tu vida.
Para finalizar quiero compartir contigo muchas veces nos imaginamos que grandes empresas que vemos hoy día siempre fueron exitosas pero no es así ellos han tenido que reiniciar. Un ejemplo de esto es Apple o Netflix que comenzó rentando DVD por correo más hoy es una plataforma exitosa de streaming.
Si es necesario toma una pausa y analiza si necesitas hacer un reinicio para llegar de mejor manera a tu propósito.
Hoy te invito, si estás en pausa, no te preocupes es solo un momento pero inicia nuevamente tantas veces como necesites. ¡Disfruta del momento que estás pasando!Cuéntame en la parte de abajo, ¿has pasado por esto y cómo lo manejaste? ¿Lo estás pasando actualmente?
Un abrazo,
PAT
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